Mala gestión emocional
Zull padecía un aso grave de agresión y mala gestión emocional. Tras intentarlo por varios medios, sus tutores acudieron a nosotros. Era muy difícil que Zull estuvieran quieto ante la presencia de perros, presentaba ladridos espontáneos y gran mal estar.
Sus dueños pusieron toda la carne en el asador y fue un proceso largo y costoso, pero mereció la pena.
Durante años, Zull ha sido nuestro mejor alumno en las clases junto a otros perros destacando en obediencia, agility y detección de sustancias. Muchas gracias familia, por confiar en nosotros.